El comercio de divisas, también conocido como comercio de divisas o divisas, es la conversión de una moneda a otra. Es uno de los mercados más cotizados del mundo, con individuos, empresas y bancos que contribuyen a un volumen diario promedio de 5 billones de dólares.
Si bien se realiza una gran cantidad de divisas con fines prácticos, la gran mayoría de las conversiones de divisas las realizan los operadores de Forex con el objetivo de obtener ganancias. La cantidad de moneda convertida todos los días puede hacer que los movimientos de precios de algunas monedas sean extremadamente volátiles. Es esta volatilidad la que puede hacer que FX sea tan atractivo para los operadores de forex: generando una mayor probabilidad de obtener altas ganancias, al tiempo que aumenta el riesgo.
¿Cómo funcionan los mercados de divisas?
A diferencia de las acciones o materias primas, el comercio de divisas no se realiza en bolsas sino directamente entre dos partes, en un mercado extrabursátil (OTC). El mercado de divisas es administrado por una red global de bancos, distribuidos en cuatro centros de comercio de divisas en diferentes zonas horarias: Londres, Nueva York, Sídney y Tokio. Debido a que no hay una ubicación central, puede operar en Forex las 24 horas del día.
Hay tres tipos diferentes de mercado de divisas:
- Mercado de divisas al contado: el intercambio físico de un par de divisas, que tiene lugar en el punto exacto en que se liquida la operación o en un corto período de tiempo.
- Mercado Forex a plazo: se acuerda un contrato para comprar o vender una cantidad establecida de una moneda a un precio específico, que se liquidará en una fecha determinada en el futuro o dentro de un rango de fechas futuras.
- Futuro mercado de divisas: se acuerda un contrato para comprar o vender una cantidad determinada de una moneda determinada a un precio y fecha establecidos en el futuro. A diferencia de los forwards, un contrato de futuros es legalmente vinculante.
La mayoría de los operadores que especulan sobre los precios de divisas no planean recibir la moneda en sí; en cambio, hacen predicciones de tipo de cambio para aprovechar los movimientos de precios en el mercado.
¿Qué es una moneda base?
Una moneda base es la primera moneda listada en un par de divisas, mientras que la segunda moneda se llama moneda de cotización. El comercio de divisas siempre implica la venta de una moneda para comprar otra, por eso se cotiza en pares: el precio de un par de divisas es cuánto vale una unidad de la moneda base en la moneda de cotización.
Cada moneda del par se enumera como un código de tres letras, que tiende a estar formado por dos letras que representan la región y una que representa la moneda misma. Por ejemplo, GBP / USD es un par de divisas que implica comprar la libra esterlina y vender el dólar estadounidense.
Para mantener las cosas ordenadas, la mayoría de los proveedores dividen los pares en las siguientes categorías:
- Pares principales: Siete monedas que representan el 80% del comercio mundial de divisas. Incluye EUR / USD, USD / JPY, GBP / USD y USD / CHF.
- Pares menores: con menor frecuencia de negociación, a menudo presentan las principales monedas entre sí en lugar del dólar estadounidense. Incluye: EUR / GBP, EUR / CHF, GBP / JPY.
- Exóticos: una moneda importante contra una de una economía pequeña o emergente. Incluye: USD / PLN, GBP / MXN, EUR / CZK.
- Pares regionales: pares clasificados por región, como Escandinavia o Australasia. Incluye: EUR / NOK, AUD / NZD, AUD / SGD.
¿Qué mueve el mercado Forex?
El mercado de divisas está compuesto por monedas de todo el mundo, lo que puede dificultar las predicciones del tipo de cambio, ya que hay muchos factores que podrían contribuir a los movimientos de los precios. Sin embargo, como la mayoría de los mercados financieros, el forex es impulsado principalmente por las fuerzas de oferta y demanda, y es importante comprender las influencias que impulsan las fluctuaciones de precios aquí.
Bancos centrales
El suministro está controlado por los bancos centrales, que pueden anunciar medidas que tendrán un efecto significativo en el precio de su moneda. La flexibilización cuantitativa, por ejemplo, implica inyectar más dinero en una economía y puede hacer que baje el precio de su moneda.
Reportes de noticias
Los bancos comerciales y otros inversores tienden a querer poner su capital en economías que tienen una perspectiva sólida. Entonces, si una noticia positiva llega a los mercados sobre una determinada región, alentará la inversión y aumentará la demanda de la moneda de esa región.
A menos que haya un aumento paralelo en la oferta de la moneda, la disparidad entre la oferta y la demanda hará que su precio aumente. Del mismo modo, una noticia negativa puede hacer que la inversión disminuya y baje el precio de una moneda. Es por eso que las monedas tienden a reflejar la salud económica reportada de la región que representan.
El sentimiento del mercado
El sentimiento del mercado, que a menudo es una reacción a las noticias, también puede desempeñar un papel importante en la conducción de los precios de las divisas. Si los comerciantes creen que una moneda se dirige en una determinada dirección, comerciarán en consecuencia y pueden convencer a otros para que sigan su ejemplo, aumentando o disminuyendo la demanda.
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